Registrar una marca o nombre comercial
En este artículo explicaremos las ventajas que supone realizar el proceso de registro marca para tu negocio. Igualmente, te contamos qué se entiende por marca comercial y quién puede registrarla, entre otras cosas.
¿Qué se entiende por marca comercial?
Atendiendo a la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM), la marca comercial es un signo que sirve para distinguir tus productos o servicios del resto que se encuentran en el mercado.
Por lo tanto, la marca es un signo distintivo. Sirve para diferenciar e individualizar en el mercado tus productos o servicios de otros que sean idénticos o parecidos. Es un indicador de calidad y un medio de promoción de ventas, por lo que es uno de los valores principales de tu actividad empresarial.
¿Por qué registrar una marca comercial?
Debes tener presente que el registro de una marca comercial otorgará a tu empresa un derecho exclusivo. Un derecho a impedir que terceros comercialicen productos idénticos o similares con tu marca o utilizando una marca tan similar que pueda crear confusión, en términos similares a las patentes.
Si decides esperar y no registrar tu marca comercial, otras empresas podrían utilizar (a sabiendas o sin ser conscientes de ello) para sus propios productos el mismo signo o un signo semejante que induzca a confusión.
En ese caso, tus competidores pueden utilizar una marca semejante o idéntica a la tuya, así como aprovechar la reputación y relaciones que has ido creando con tus clientes y asociados comerciales.
Lógicamente, esto no sólo disminuirá las ganancias de tu empresa y confundirá a tus clientes, sino que dañará tu reputación e imagen, especialmente si los productos rivales son de calidad inferior.
[bctt tweet=»Por qué es recomendable que registres tu marca comercial» username=»genealiaonline»]
¿Quién puede registrar una marca?
Según la OEPM, puede solicitar el registro de una marca comercial cualquier persona física o jurídica. Si se trata de una persona física deberá disponer de nacionalidad española o que cuente con permiso de residencia habitual en España.
En el caso de que sea una persona jurídica la que quiera registrar una marca, será necesario que se haya constituido legalmente en España. O bien, que disponga de un centro de explotación industrial o comercial en territorio español.
La marca es un signo distintivo. Sirve para diferenciar e individualizar en el mercado tus productos o servicios de otros que sean idénticos o parecidos. Es un indicador de calidad y un medio de promoción de ventas.
Ambas pueden actuar bien directamente, bien mediante agente de la propiedad industrial o representante debidamente autorizados.
En caso de tratarse de no residentes en un Estado miembro de la Unión Europea deberán actuar, en todo caso, mediante Agente de la Propiedad Industrial. Los residentes en un Estado de la Unión Europea que actúen por si mismos, deberán designar un domicilio en España a efectos de notificaciones.
¿Cuánto dura en España el registro de una marca?
El registro de la marca comercial se realiza por un plazo de 10 años, pero podrás solicitar la renovación por otros períodos sucesivos de la misma duración.
Diferencia entre marca y nombre comercial
Otro ejemplo bastante ilustrativo sería el de Apple. Apple es el nombre comercial y los distintos productos que ha lanzado al mercado como los iPod, iPhone o iPad, están registrados como marcas.
¿Cómo realizar el trámite para registrar una marca?
Puedes informarte en la web de la Oficina Española de Patentes y Marcas, de cara a obtener los modelos necesarios, presentarlos y tramitar la solicitud.
La importancia del informe previo de viabilidad de registro de tu marca comercial
Antes de presentar la solicitud de registro de marca, podrás solicitar un informe previo de viabilidad del registro. Este informe te servirá para saber si ya se te han adelantado al registrar la marca y ver qué opciones siguen disponibles.
Si lo prefieres, puedes encargar esta gestión a un asesor y de esta manera olvidarte de todos los trámites.
Y recuerda, registrar una marca es un acto totalmente voluntario, no obligatorio, pero sí muy recomendable ya que implica el nacimiento del derecho exclusivo sobre tu marca comercial.
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